Quienes formamos parte de los colectivos y asociaciones vecinales del barrio denunciamos la campaña de acoso y derribo del Ayuntamiento de Madrid contra cualquier iniciativa ciudadana participativa. Agotaremos todas las vías a nuestra disposición para hacer frente a la sentencia del TSJM, que revoca el fallo judicial que reconocía el valor social del proyecto Haciendo Barrio en la Casa del Cura, que ahora se enfrenta a la amenaza del desalojo. 

 

El proyecto Haciendo Barrio corre peligro de desaparición por la estrategia de acoso y derribo del Ayuntamiento de Madrid a las iniciativas vecinales participativas. El equipo del alcalde Almeida intenta revocar en los tribunales la cesión por concurso público del edificio conocido como la Casa del Cura, situado en la Plaza del Dos de Mayo 1, que desde 2019 gestiona la Asociación de Vecinos de Malasaña, Universidad y Centro.

Pese a que el juzgado de lo Contencioso‐Aministrativo Nº 10 de Madrid frenó el desalojo previsto por el consistorio el pasado verano, al valorar el servicio público y la aportación social del proyecto, un recurso del Ayuntamiento ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha revocado recientemente las medidas cautelares adoptadas por el primero.

“La sentencia establece que la representación del interés general la tiene el Ayuntamiento y no la ciudadanía, dejando al arbitrio de las Administraciones Públicas decidir cuándo existe o no ese interés. También señala que no se producen daños irreparables si se adopta la medida de suspensión del desalojo solicitada y que en cualquier caso podrán ser indemnizables”, explica la asociación sobre el fallo judicial, lamentando que el TSJM no valore las iniciativas vecinales participativas, “que han demostrado su gran capacidad de respuesta a los problemas a los que las vecinas y vecinos se están viendo obligados a enfrentar”.

La asociación manifiesta su desacuerdo con el citado fallo, “que deja en manos de la administración decidir cuándo existe o no interés general, por lo que consideramos que el Tribunal incurre en la dejación de sus funciones, entre las que está, precisamente, velar para que las decisiones de las Administraciones Públicas, entre ellas las municipales, no sean arbitrarias, obviando que la Casa del Cura fue cedida al proyecto Haciendo Barrio justamente por su interés público y social”.

El TSJM asegura que no hay daño irreparable “pero pone en valor la función social que en estos momentos de pandemia se realiza en la Casa del Cura, desde la que  la despensa solidaria de Malasaña Acompaña proporciona ayuda alimentaria y orientación social y legal a más de 90 familias en situación de exclusión social a las que el Ayuntamiento no ha sido capaz de atender un año después del inicio del primer estado de alarma”.

En la Casa del Cura también se desarrollan así actividades de atención psicológica gratuita, clases de artes escénicas, talleres, coro, teatro, reuniones, todas ellas abiertas a las vecinas y vecinos del barrio, que se quedarán sin el único espacio participativo y horizontal con el que cuentan.

Por todo ello, la asociación utilizará todas las vías jurídicas y administrativas de las que dispone para seguir gestionando un centro imprescindible para el desarrollo de actividades sociales y culturales, que en estas circunstancias de pandemia es aún más necesario si cabe.